“Tenemos que ser conscientes de que no se logró nada y que el desenlace será muy duro”. Con estas palabras, Diego Flores intenta enfriar los festejos en el plantel tras el gol agónico de Iván Molinas. La reciente victoria contra Chacarita no sólo permitió a San Martín de Tucumán alcanzar su quinta victoria consecutiva, sino que también consolidó al equipo como líder indiscutido de la Primera Nacional.

El trabajo constante y estratégico de Flores ha llevado al “santo” a convertirse en uno de los equipos más sólidos de la zona A. ¿Cuáles son las 10 claves que le han permitido mantenerse en la cima y construir esta racha de victorias?

Acierto en el esquema: en las primeras fechas del torneo, Flores apostó por el 4-3-3. Sin embargo, desde el partido contra San Miguel en La Ciudadela, el DT cambió a un 4-2-3-1, y los resultados hablaron por sí mismos con cinco triunfos consecutivos. El doble pivote de contención, formado por Gustavo Abregú y Matías Ignacio García, brindó mayor libertad a “Caco” García y Juan Cuevas para fortalecer la ofensiva.

Figura inesperada: ante la lesión de Pablo Hernández, Flores decidió dar más minutos a Matías Ignacio García. El exjugador de Güemes de Santiago del Estero se convirtió en una sorpresa inesperada. Aunque estuvo ausente en el último partido por suspensión, García, quien ya jugó tres partidos como titular, demostró ser clave en la distribución de pases y en la contención. Su ausencia se sintió en el partido contra el “funebrero”.

Confianza mejorada: con el cambio de esquema, Abregú dejó su rol de “cinco” de marca y se animó a avanzar al ataque. Marcó contra Talleres Remedios de Escalada y también contribuyó en la ofensiva contra Chacarita, elevando un remate y casi asistiendo a Junior Arias.

Defensa sólida: la dupla defensiva de Juan Orellana y Agustín Dattola se ha consolidado, mostrando un gran nivel, especialmente de Dattola, exjugador de Almirante Brown. Los laterales, Lucas Diarte y Gonzalo Bettini, colaboran eficazmente en defensa y ataque. Además, los ingresos de Máximo Levi y Axel Bordón no desarmaron la estructura defensiva. En los últimos cinco partidos, Darío Sand solo recibió dos goles.

Reemplazo adecuado: con la partida del lateral izquierdo Nahuel Banegas a Tigre, la CD confió en el regreso de Diarte, quien ha mejorado notablemente su nivel en cada partido, contribuyendo tanto en defensa como en ataque y ofreciendo opciones de pase.

Dupla efectiva: en los últimos encuentros, San Martín ha marcado la diferencia gracias a la combinación de “Caco” García y Cuevas. El exjugador de Belgrano aporta una visión de juego que le permite anticiparse a las jugadas, mientras que Cuevas, ex Everton, ofrece agilidad y dribbling, generando problemas para los arqueros rivales. Contra Chacarita, Cuevas remató y su disparo fue desviado en Molinas.

Aporte generalizado: aunque algunos futbolistas han tenido pocos minutos, todos buscan aportar desde donde les toque. Gonzalo Rodríguez, por ejemplo, ingresó dos veces desde el banco y anotó contra Quilmes y Estudiantes de Caseros.

Exhibición de atributos: en lo que va de la temporada, San Martín ha destacado en las jugadas a balón detenido. En los últimos cinco partidos, anotó dos goles en esta condición, ambos de Arias (uno de penal contra San Miguel y otro de tiro libre contra Estudiantes de Caseros). Además, en las segundas jugadas de pelotas paradas, rompió el marcador con goles de Dattola contra Quilmes y Abregú contra Talleres Remedios de Escalada.

Derrota a los candidatos: antes del triunfo contra Chacarita, San Martín venció a San Miguel, Quilmes y Estudiantes de Caseros, tres equipos que estaban en zona de Reducido y en la pelea por el primer puesto.

Fortaleza en La Ciudadela: San Martín ganó los últimos seis partidos disputados como local. En esta condición el equipo lleva 10 triunfos, tres empates y una derrota.